martes, 2 de agosto de 2011

BENEFICIOS DEL YOGA PARA NIÑOS

El yoga por lo regular es una disciplina física y mental que es practicada por los adultos pero también es apta para los niños y niñas.

Para este público, el maestro de yoga infantil debe adaptar el ritmo y la técnica de movimiento al grupo, considerando la edad, el tipo de niño y sus necesidades.

A partir de los cuatro o cinco años se puede introducir el aspecto físico del yoga para desarrollar la motricidad, la fuerza muscular, la coordinación y aprender a respirar.

Los maestros de la India, país donde surge la disciplina, inician tradicionalmente a los niños en una ceremonia a los ocho años, explica la psicóloga Ileana Anselin del Centro de Orientación Psicológica y Educativa (Cope).

Efectos físicos
Entre los beneficios físicos de esta disciplina para los infantes la especialista de Cope, donde se imparten talleres de yoga de verano a niños de 6 a 12 años, refiere que los ayuda a desarrollar fuerza, destreza muscular, flexibilidad y a estimular la circulación sanguínea.

En esto se parece a muchos otros ejercicios físicos solo que el yoga les permite desarrollarse en un ambiente no competitivo, aprendiendo a respirar correctamente, lo cual es vital para relajarse y concentrarse.

También se fortalece la columna vertebral y se trabaja la postura correcta, lo cual reduce las desviaciones y el dolor de espalda. La mejoría de la postura tiene efectos positivos sobre la autoestima del niño, agrega Anselin.

En los últimos años se han hecho investigaciones científicas sobre los efectos del yoga en la salud de los niños y se ha demostrado que fortalece el sistema inmunológico y permite que músculos, órganos y glándulas funcionen de modo óptimos.

Las emociones
La psicóloga indica que, a nivel emocional y mental los aportes son múltiples, ya que por medio de las posturas (asanas) y la respiración, los niños aprenden a manejar sus emociones.

Hay posturas que generan ciertos estados de ánimo, como es el caso de la posición del león, en la cual se sacan los hombros y la lengua con una fuerte inhalación por la boca, se utiliza si el niño siente miedo.

Las posturas de equilibrio requieren una atención sostenida y un enfoque y esto conlleva el desarrollo de la concentración y la atención.

La respiración es una parte integral del yoga. Una buena respiración calma la mente, favorece la relajación y descarga tensiones, esto logra mayor nivel de atención, y en los niños, un mejor rendimiento escolar.


NIÑOS QUE PUEDEN PRACTICAR YOGA
La psicóloga Ileana Anselin dice que el yoga es recomendable para todos los niños. Destaca que, ayuda a los niños hiperactivos o ansiosos porque les ayuda a canalizar su energía, a tranquilizarse y a relajarse.

Muchos niños inquietos pueden aprender el autocontrol a través del yoga. El niño tímido o vergonzoso aprende a reafirmar su autoestima porque en la clase de yoga no hay premios ni fracasos y se fomenta la cooperación. Los niños que hacen yoga son menos rebeldes en la adolescencia y generan menos adicciones.

Autora:Carla Sánchez Brache